Desde hace tres meses, aproximadamente, en Cerro chato, se terminó la tranquilidad, y con ellas las siestas. Es que desde esa fecha a los jóvenes, y no tan jóvenes, se les ha dado por cambiar sus caños de escape originales para usar el ‘’ famoso roncador. ’’
Aunque no son muchas las motos que lo usan, se hace imposible descansar y mucho menos dormir, para aquella gente, que al otro día tiene que madrugar, para cumplir con su jornada de trabajo.
Se ha pensado entre un grupo de vecinos salir a juntar firmas e incluso ya hubieron quienes denunciaron, pero no se logró nada.
Pedimos por medio de su prestigioso diario, que por favor, ‘’los Motoqueros’’, al leer esta nota, tomen conciencia de la molestia que causan, para poder convivir en paz y si se puede en SILENCIO.
Noticia redactada por 4to año